jueves, julio 06, 2006

CUANTO MIEDO LE TIENEN A ANDRES MANUEL.
La Historia en Breve
Por Ciro Gómez Leyva (negritas por mi)
Diario Milenio, Miercoles 5 de Julio de 2006
Es enfermiza, irresponsable, la insistencia de los dirigentes del PAN y algunas personas, grupos empresariales, locutores de radio e incluso medios de comunicación, para que Andrés Manuel Lopéz Obrador reconozca su derrota en las elecciones del domingo. Esa prisa intransigente es hoy la principal amenaza para echar a perder la luminosa jornada del 2 de julio. ¿Por qué tendría Lopéz Obrador que levantarle la mano a Felipe Calderón, si el propio presidente del IFE, Luis Carlos Ugalde, ha aceptado que, por inconsistencias o errores, 3 millones de votos emitidos no están cargados al PREP? ¿Por qué tendría que hacerlo si el PREP sólo le da una ventaja de 400 mil votos a Calderón?
Pero la obsesión por enterrar al odiado Peje está superando a la lógica mas simple. Nunca pensé que los grupos conservadores le tuvieran tanto miedo a Andres Manuel.
Esos fanáticos, mal disfrazados de demócratas, deberían sentarse a estudiar lo que ocurrió en Alemania hace poco. El 18 de septiembre pasado, la coalición de la Union Democratica Cristiana y la Union Social Cristiana, con Ángela Merkel al frente, ganó por un millon de votos la elección de los miembros del parlamento al Partido Socialdemócrata, de Gerhard Schröeder. Pero había una controversia sobre como se debían repartir los escaños. Merkel y los suyos se movieron y Schröeder apeló en todas las instancias legales al alcance, antes de aceptar que habia perdido y dejar su cargo de canciller el 22 de noviembre. Dos meses y cuatro días tomó dirimir la elección en la Alemania ejemplar.
Por no hablar de Al Gore, el candidato demócrata a la presidencia de Estados Unidos en el 2000. Obtuvo mas votos de la gente que el republicano George Bush, pero al final, Bush ganó con los votos del Colegio Electoral: 271 a 266. La clave era el estado de Florida, que aportaría los votos decisivos en el Colegio Electoral. Bush ganó gracias a 537 personas que marcaron la diferencia en Florida. Quinientos treinta y siete sufragios en la gran democracia occidental.
Gore llevó el caso a la Suprema Corte de Justicia, que, tres semanas después de los comicios, resolvió cerrar el proceso y proclamar ganador a Bush.
No entiendo, pues, por qué nuestros fachos se enfurecen porque Lopéz Obrador pide, simplemente, que se cuenten los votos.

5 comentarios:

merrsita dijo...

Siguen con eso.. yo me pregunto solo algo... cuando dieron el conteo pre-eliminar no quedo agusto con los resultados... cuando el IFE dio los resultados tampoco...cuando el mismo dijo antes varios medio de comunicacion "La democracia o se gana o se pierde"... sr. Obrador.. porque no acepta los resultados finales?

gamaliel dijo...

Pues no quedó a gusto porque quedo demostrado que hay irregularidades. ¿tu hubieras quedado a gusto si Calderón hubiera quedado en 2o lugar, tan cerca del primero con tantas irregularidades? supongo que no verdad
pero como no te agrada el peje...

merrsita dijo...

No es que no me agrede el peje , Calderon tampoco me agrada y de Madrazo ni hablar... si el PRD hubiese ganado ok, gano, pero el PAN gano, ok gano... somos un país y si en verdad queremos progresar, debemos unirnos ya no nos metamos tanto en que si uno conto bien y otro no... al final de cuentas todos queremos lo mismo...progresar... mejor deberiamos evitar escandalos que hacen que el pais quede peor. gracias por su atencion. :)

gamaliel dijo...

A eso respondo con lo siguiente:

"la transición sólo puede completarse mediante una profunda reforma de las instituciones, que liquide el autoritarismo y conduzca a un genuino estado de derecho."

Porfirio Muñoz Ledo

Y lo dijo alguien que sabe mucho mas que tu o que yo de estas cosas

gamaliel dijo...

Si no dejamos las cosas en claro, puede ocurrir, que apoyemos con el silencio un fraude y dejemos la puerta abierta a que nos vean la cara de manera constante. Si queda todo en claro, TODO tendra una legitimidad incuestionable, sea uqein sea que llegue a la presidencia